RESOL. DE CREACIÓN DE LA ESCUELA:
1909 – Decreto firmado por el Presidente de la República Dr. José Figueroa Alcorta- con categoría de Escuela Normal Rural.
1.3 EJE HISTÓRICO
La Escuela Normal Superior “Dr. José Benjamín Gorostiaga” ha alcanzado un lugar de relevancia entre las Instituciones Educativas Santiagueñas, no solo dentro de su comunidad de origen, La Banda, sino también en el ámbito nacional y provincial, gracias a una fecunda trayectoria desplegada a lo largo de 91 años de existencia.
Su historia se inicia con el Decreto de Fundación firmado en 1909 por el entonces Presidente de la República, Dr. José Figueroa Alcorta y su Ministro de Instrucción Pública, R. S. Naón. Inició el dictado de clases el 18 de Abril de 1910, en un antiguo edificio ubicado en Besares y Alberdi, intersección de dos arterias importantes de la ciudad, donde posteriormente funcionaría otra destacada institución bandeña: el Centro Recreativo.
Aunque fue la segunda de su género creada en la Provincia, no fue la primera escuela de La Banda. La precedieron en el tiempo la Estrella Marina, la Libertad y la Amadeo Jacques, y le sucedieron la Escuela de Artes y Oficios (actual Escuela Técnica Nº2 “Ing. Santiago Barabino”), y la 27 de Abril.
Su primera denominación fue Escuela Normal Rural Mixta; la Dirección estaba a cargo de Don Martín Uriondo y la Regencia era desempeñada por Don Nicolás Juárez. Sus egresados recibían el título de Maestro Rural y, desde las primeras promociones, se destacaron en el ejercicio de la docencia, tanto en los centros urbanos como en los más remotos lugares del interior de la provincia.
La historia de la Escuela Normal corre paralela a la historia de La Banda. Por aquel entonces, el primitivo caserío ubicado en la margen izquierda del Río Dulce había devenido en una pujante población que fundó su progreso en dos factores fundamentales: la llegada del ferrocarril en 1884/85 y el desarrollo económico basado en la explotación agrícola. El ejido municipal tomó como centro la estación ferroviaria y a su alrededor se trazaron calles y avenidas con visión de futuro.
El crecimiento demográfico fue notable gracias a la incorporación de inmigrantes de variado origen, principalmente italianos, españoles y sirio-libaneses que no se mantuvieron en comunidades cerradas, sino que se mestizaron en alto grado con la población nativa.
El comercio y las nacientes industrias también se vieron incrementadas. Como consecuencia de esta etapa floreciente, La Banda adquiere rango de ciudad el 16 de Septiembre de 1912.
En este contexto la Escuela Normal también crece. El número de alumnos y docentes se multiplica y, en 1914, es incorporada ala categoría de Escuela Normal de Subpreceptores.
En 1919, su denominación es Escuela Normal de Preceptores; en 1931, Escuela Normal de Enseñanza Vocacional y, en 1932, Escuela Normal de Adaptación Regional. A
pesar de estos cambios de nombre, su función de formador de maestros se mantiene inalterable. La sólida preparación de sus egresados, provenientes tanto de la ciudad como del interior de la provincia, hizo posible que se destacara, no solo en lo pedagógico, sino en los más variados ámbitos profesionales y culturales.
El importante crecimiento de la población escolar determinó que el 28 de Septiembre de 1926, la Cámara de Diputados de la Nación sancionara la Ley Nº967, por la cual se expropiaba una manzana comprendida entre las calles Mailín, Atamisqui, España y San Carlos, destinada a la construcción de un nuevo edificio acorde con las reales necesidades de la Institución.
La inauguración del local que la escuela ocupa actualmente, tuvo lugar el 7 de Noviembre de 1935. En la ocasión recibió el nombre de “Dr. José Benjamín Gorostiaga” en honor al ilustre constitucionalista santiagueño. Al acto oficial asistieron el Ministro de Justicia e Instrucción Pública de la Nación, Dr. Manuel María Uriondo, el Gobernador de la Provincia, Dr. Juan B. Castro; la Directora del establecimiento, Doña María Ester Meyer de Otero y numerosas autoridades.
En 1945, por disposición ministerial, pasa a la categoría de Escuela de Maestros Normales Regionales y, por un considerable período de tiempo, cumple sus funciones sin que se produzcan innovaciones de importancia. Es la década del 70 la que marca, como en todas las escuelas del país, el cambio que afecta su esencia de formadora de formadores: la Escuela Normal de Maestros deja de operar como tal para dedicarse a la formación de bachilleres con diversas terminalidades.
En el caso específico, de la Escuela Normal “Dr. José Benjamín Gorostiaga” se incorpora, además el Ciclo Comercial, tanto diurno como nocturno, para otorgar el título de Perito Mercantil.
Sin embargo, en 1972, con la creación del Profesorado para la Enseñanza Primaria, puede recuperar su rol tradicional de formadora de maestros y pasa a denominarse Escuela Normal Superior.
Con el retorno de la democracia y en el contexto de una sociedad que exige nuevos roles de los docentes y de las instituciones, se inicia una etapa de cambios profundos: en 1987 se crea el Profesorado en Ciencias Jurídicas y Contables, con lo cual la escuela pasa a denominarse Normal Nacional Superior de Profesorado, y, en 1988, se implementa el Proyecto MEB (Maestros de Educación Básica). Su objetivo general era “brindar las bases para la formación permanente de un Educador, capaz de abrevar en la identidad cultural de nuestro pueblo y de transmitir mediante un sistema democrático de adecuación histórica de dichos saberes, la realidad social argentina y latinoamericana”.
La implementación del Proyecto MEB fue acompañada por un “Programa de Reciclaje” de los cuadros docentes, bajo la conducción de expertos enviados por el Ministerio de Educación de la Nación. Estos encuentros de capacitación se llevaron a cabo dentro y fuera de la provincia. Normal Banda tuvo en los mismos destacada participación. Y si bien egresaron sólo tres promociones de maestros de Educación Básica, el Proyecto caló muy hondo en la Institución que vio potenciada al máximo su rol de formador de formadores. Muchos de los principio básicos del MEB, resurgen vigorosamente en posteriores proyectos educativos puestos en práctica en el establecimiento (C.B.G. y P.T.F.D.).
El Proyecto MEB se vio reforzado, además, por otras experiencias pedagógicas que se fueron incorporando paulatinamente, tales como el DOI (Departamento de Orientación Interdisciplinaria), el PIO (Plan de Información y Orientación), el BICRA (Sistema Nacional de Bibliotecas Escolares como Centro de Recursos para el Aprendizaje) y el CRA (Centro de Recursos para el Aprendizaje).
Otro hito de importancia es la incorporación del Proyecto C.B.G. (Ciclo Básico General), en 1989. Se trata de un plan piloto aplicado en 18 escuelas del país como respuesta al reclamo social generalizado de cambios de fondo en la educación secundaria.
En el C.B.G. el trabajo se organiza por Áreas (Cs. Exactas Naturales, Expresión y Comunicación, Cs. Sociales y Tecnología). Cuenta con Talleres Integrados, Talleres Optativos, Talleres Específicos y espacios rentados para la capacitación y planificación docente (Taller de Educadores y Planeamiento de Área).
El Proyecto propone “la integración de la formación humanística, científica y técnica con la formación de la personalidad y la formación social democrática… en relación con las características regionales y con la paulatina orientación vocacional del adolescente”.
En 1992, la transformación llega al Ciclo Superior de la carrera de Perito Mercantil que es reemplazada por el BOEA (Bachiller con Orientación en Empresas Autogestionarias). Su objetivo es permitir al joven egresado insertarse en su medio como parte activo de la sociedad, capaz de potencializar sus aptitudes, desarrollar su sentido de Hombre-Empresa, incorporando los valores de la Cultura del Trabajo, no como una mera interpretación sino desde el protagonismo de vivenciar su primera experiencia laboral.
Se contempla un Sistema de Pasantías que permiten la apertura a la comunidad y dan a los contenidos del plan un significado diferente: lo procedimental y lo actitudinal interactúan con lo cognitivo en una dimensión real, exigente pero reconfortante.
El adolescente se enriquece con la observación crítica y reflexiva del ámbito empresarial y toma conciencia de la necesidad de la actualización y autosuperación continuas.
Los años 1992/93 marcan un agitado período en la historia de la Escuela Normal, embarcada, con toda la comunidad educativa, en la lucha por la no transferencia de escuelas normales al ámbito provincial. Se consideraba que no estaban dadas las condiciones para el traspaso, dado el angustioso estado de emergencia socio-económica y educativa que vivía por entonces Santiago del Estero. La transferencia se concretó a pesar de todo.
Entre los avatares de esa larga lucha, Normal Banda venía gestando, desde fines de 1991, su entrada a un proyecto innovador para la Formación Docente, que, tras varias instancias de consulta, devolución, ajustes de la propuesta y preparación previa de los docentes dispuestos a participar en el mismo, se puso en marcha en 1993.
Se trata del P.T.F.D. (Programa de Transformación de la Formación Docente), implementado exclusivamente en la Escuela Normal “Dr. José Benjamín Gorostiaga”, dentro de la jurisdicción provincial, (el programa se aplica en 10 provincias). Sus lineamientos fundamentales son: integración institucional, transformación curricular y formación docente continua.
La integración institucional se concibe como la articulación dinámica entre la institución formadora con las escuelas a las cuales se destinan los productos de formación, otros institutos formadores, universidades y sectores de producción académica.
La transformación curricular se propone repensar el proceso formativo tomando como eje la vinculación teoría-práctica, la investigación-acción, sobre los problemas de la enseñanza y la redefinición del rol docente. La formación docente contínua implica articular la formación de grado, la capacitación en servicio de los docentes de la institución formadora y la reconversión de los docentes de los distintos niveles.
El diseño curricular se organiza en tres áreas: Formación General, Formación Especializada y Ofertas Institucionales. En función de las nuevas tareas del instituto formador, se definen tres departamentos coordinadores: Grado, Extensión e Investigación. Y los docentes formadores de formadores cumplen diferentes actividades dentro de la carga horaria modular: dictado de clases, capacitación, asesoría a alumnos, tareas de extensión y/o investigación.
Los egresados como Profesores para la Enseñanza Básica y para la Educación Inicial están habilitados para desempeñarse en 1er. y 2do. Ciclo de la E.G.B. y en el Nivel Inicial, según el Nuevo Sistema Educativo. 1995 produjo la primera promoción de Profesores.
El Programa se perfila asi como la propuesta innovadora que anticipa algunas líneas organizativas del trabajo docente que más tarde serán retomadas como funciones de los IFD, pero planteadas desde otra política educativa que tendrá su expresión –en tanto marco legal- en la Ley Federal de Educación.
El proceso de acreditación de los IFDC (Institutos de Formación Docente Contínua), desencadenado a partir de los Acuerdos Federales del CFCyE que normaban la transición de la anterior estructura a la nueva pautada por la ley 24.195, puso a la comunidad educativa toda en estado de asamblea permanente,para que la Reforma no interrumpiera los propios procesos de transformación de la formación docente que ya venían aconteciendo en la Normal Banda. Un trabajo intenso, sostenido y solidario, unido a una rica experiencia en proyectos de inno-vación pedagógica, le permitió enfrentar dicho proceso de acreditación con una firme actitud crítica y sin prisas inútiles. Así fue transitando desde el Diagnóstico Institucional a la elabo-ración de los Documentos -Protocolo, PEI, Diseños Curriculares- que le posibilitaran validar a nivel nacional las carreras docentes en curso (Educación Inicial -Primero y Segundo Ciclo de la EGB) y la nueva propuesta para Tercer Ciclo EGB y la Educación Polimodal en Economía.
Durante la primera etapa del proceso de acreditación de los IFDC pasó a ser una de las dos sedes del Centro de Formación Docente Contínua Nº 4, constituído por Resolución Serie “A” Nº 363/ 98 de la Subsecretaría de Educación de la Provincia de Santiago del Estero.
En el año 2001 retoma su anterior denominación de Escuela Normal Superior “Dr. José Benjamín Gorostiaga”. En este carácter y como resultado de toma de decisiones en el ámbito de la gestión política nacional, que modifican de hecho el cuadro de situación de los Institutos de Formación Docente, se constituye en una de las sedes del Proyecto Polos de Desarrollo en la Jurisdicción Provincial, trabajando en red con otros doce IFD del interior de la Provincia, vinculándose con otros 80 Polos a nivel nacional.
El presente sorprende a la Escuela Normal Banda convertida en Institución pionera del cambio educativo, tanto desde las acciones destinadas a la capacitación de miles de docentes santiagueños de todos los niveles (desde 1994 hasta hoy 2002), como desde la participación en redes de docentes que hacen investigación educativa (Universidades, Sindicatos, Centros de Investigación).
Constituida en unidad educativa, sus cuatro niveles -Inicial, Básico, Medio y Superior- trabajan en forma integrada, democrática y participativa para realimentarse y autogestionar sus propios procesos de transformación con un ritmo que no sabe de pausas.
Nota: Síntesis elaborada a partir de toda la documentación acumulada sobre la historia de a escuela.